Tema 1. Un buen líder educativo

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Indicador de logro

1. Practica estrategias innovadoras con los docentes para mejorar los aprendizajes significativos de los estudiantes y prepararlos para enfrentar de mejor forma los desafíos en la sociedad actual.

1. Lea el siguiente texto y reflexione.

Un buen líder educativo cuenta con diversas competencias que le permiten motivar, coordinar, orientar y trabajar con los diferentes grupos que conforman la comunidad educativa, en la que todos los miembros son importantes para mejorar de manera permanente lo que sucede a diario.

2. Lea la pregunta y responda en su cuaderno.

• Tome en cuenta su experiencia de trabajo en el instituto.

¿Qué significa ser “motor de cambio”?

Como director y líder que trabaja a favor del centro educativo tiene la oportunidad de focalizar sus acciones en el mejoramiento de los aprendizajes de los estudiantes. Sabe por experiencia que para lograr cambios debe ser el “motor” del instituto.

¿Cómo explica lo que significa “ser motor de cambio” en un centro educativo?

3. Lea el esquema “Estilos de liderazgo”. Elija los que considera más importantes para ser motor de cambio en el centro educativo a su cargo.

Desarrollo

Liderazgo

La vida es integral. Los seres humanos son una unidad conformada por diferentes manifestaciones: intelectuales, artísticas, religiosas y otras. De igual manera, la educación es integral, pero para que el aprendizaje sea efectivo ha sido necesario separar las áreas de conocimiento en comunicación, cálculo, ciencias naturales y otras.

Partiendo de este principio, el director debe tener presente que dirigir un centro educativo es complejo y requiere de un liderazgo positivo. Es decir, un liderazgo motivador, basado en la búsqueda de la mejora continua y en un ambiente agradable para todos. Su gestión y organización deben estar acompañadas de equidad para influir de manera adecuada en el logro de los aprendizajes de los estudiantes.

El director debe ser el motor que impulsa la transformación del centro con el ejercicio de su liderazgo y acompañado de un equipo comprometido, cuyo fin sea alcanzar juntos la meta más importante: preparar a los estudiantes para la vida.

Liderazgo directivo centrado en el aprendizaje

Lo primero que debe propiciar un director como líder del centro educativo es lograr que los estudiantes adquieran aprendizajes significativos y que, con ello, mejoren los resultados. Para esto, debe centrar la atención en el aprendizaje de los estudiantes.

Para lograrlo, es necesario que impulse la integración y cohesión de los diferentes grupos que conforman la comunidad educativa; apoye a los docentes en aspectos pedagógicos e interpersonales, en especial con los estudiantes, y sea un buen comunicador, negociador y mediador para que tome decisiones justas, participativas y democráticas, cuando deba resolver algún conflicto.

En otras palabras, es necesario que tenga clara conciencia del rol que le corresponde desempeñar, el cual se transforma con la participación de todos los involucrados, incluyendo a los mismos estudiantes.

Con el interés de apoyarlo en esta importante labor, a continuación se incluyen algunas actividades para tomar en cuenta.

1. Prácticas docentes innovadoras que propicien el aprendizaje.
2. Planificación participativa.
3. Evaluación para la mejora continua.
4. Participación social responsable.
5. Trabajo en equipo y colaborativo.
6. Ambientes seguros para el aprendizaje.
7. Transparencia y rendición de cuentas.

Para ser desarrollados de la mejor manera, estos elementos necesitan una organización flexible.

Es decir, que se adapte a los cambios, demandas y necesidades del medio en el que funciona.

Actualmente, las exigencias de las sociedades globalizadas son cada vez mayores para las nuevas generaciones. El solo hecho de vivir en un mundo en el cual la comunicación es veloz y masiva obliga a quienes tienen la responsabilidad de formar a nuevas generaciones, a reflexionar sobre la importancia de convertir una institución educativa rígida y tradicional en una flexible y dispuesta al cambio. Esto requiere de lo siguiente:

La participación, colaboración y compromiso de todos los involucrados, comenzando por directores, docentes, administrativos y estudiantes del centro educativo.

• El apoyo de padres de familia, exalumnos del centro educativo, organizaciones externas, tanto nacionales como internacionales, interesadas en la educación y comunidad en general.

La clave para lograr una transformación organizacional progresiva es motivar a las personas involucradas para que participen, colaboren y, sobre todo, se comprometan como un gran equipo para alcanzar metas comunes, además de motivar e involucrar a otros grupos y sectores de la comunidad a que participen.

Recuerde que una tarea siempre es más fácil si se hace en equipo. El desarrollo de un centro educativo y su comunidad se obtiene con el esfuerzo de todos.

Para fortalecer el proceso de transformación de un centro educativo por medio del trabajo en equipo, se recomienda realizar actividades en las que se involucren y apoyen todos para lograr los objetivos comunes.

Cierre

Actividades de aplicación

1. Lea el texto. Puede realizar estas actividades en el centro educativo.

Trabajamos juntos

Esta actividad tiene como objetivo aumentar la motivación y la cohesión de un grupo por medio del trabajo en equipo. Además, facilita su desarrollo y orienta a los participantes hacia una vivencia sencilla de colaboración y solidaridad que puede enriquecerlos como corresponsables de la transformación del centro educativo.

Materiales necesarios:

• Una mesa
• Una pizarra
• Yeso o marcadores
• 20 hojas de papel

Pasos para seguir:

• Convoque a diez estudiantes y a diez docentes del centro de estudios.
• Conforme dos equipos con cinco estudiantes y cinco docentes en cada uno.
• Coloque una mesa en un salón y solicite a los dos grupos que se ubiquen a la misma distancia de la mesa, pero en lados diferentes.
• Explique que los dos grupos deben llevar a la mesa varios objetos (puede pedir artículos fáciles de obtener como un cincho, un gancho de pelo u otro y artículos difíciles de encontrar, como un centavo, una calceta u otro). En este punto es importante que ponga atención a cómo actúan los participantes en cada grupo, para hacerlo notar en el momento de la reflexión.
• Luego, solicite a los participantes que reflexionen sobre el comportamiento de cada uno en función de su equipo. Entregue una hoja de papel a cada uno para que, en la misma, anoten las observaciones sin personalizarlas.
• Una vez escritas las observaciones, cada participante identificará actitudes positivas y pasará al frente para anotarlas en la pizarra sin repetirlas.
• Para finalizar la actividad, establezca conclusiones y resalte los comportamientos y actitudes que propician la unión del equipo en la búsqueda de un objetivo común.
• Tome nota de las actitudes y los comportamientos más importantes. Elabore un cartel con esta información y colóquelo en un lugar visible para

2. Sugiera a los participantes que repliquen la experiencia en sus aulas y que, de preferencia, la faciliten en parejas (estudiante y docente).

• Recuerde que mientras enseña, aprende.

En la teoría del aprendizaje significativo, la persona que aprende –aprendiz– es el centro del proceso, el que construye su propio aprendizaje al atribuirle significado a lo que aprende.

Espacio vital en el que se desarrolla el ser humano. Conjunto de estímulos que condicionan al ser humano desde el momento mismo de su concepción.

Un grupo de personas que trabajan hacia una meta común para el cual todos son mutuamente responsables.

Es la unidad de las ideas que se logra cuando estas se vinculan mediante recursos lingüísticos como palabras de enlace, palabras clave o pronombre, entre otros.

Establecimiento de carácter público, privado, municipal o por cooperativa a través del cual se ejecutan los procesos de educación escolar.

Indicadores de éxito de un plan escrito en forma específica.

Destrezas fonológica que consiste en juntar fonemas o sílabas para formar una palabra.

Es un documento funcional, generalmente breve, que sirve para comunicarse por escrito en situaciones de la vida cotidiana.