Haga que los padres participen

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Involucrar a los padres en trabajos conjuntos con la escuela para promover el aprendizaje académico y socio-emocional de los estudiantes, con toda probabilidad mejorará los resultados.

Resultados de la investigación[editar | editar código]

Cuando la casa y la escuela colaboran para implementar estrechamente los programas de aprendizaje socio-emocional, los estudiantes ganan mucho y los efectos de los programas son más duraderos y profundos. A medida que más y más niños son bombardeados con mensajes de la cultura de masas, Internet, televisión, música, videos y otros escaparates que no pasan por el filtro de los adultos, cada vez es más importante que los responsables decisivos en la vida de los niños emitan mensajes sólidos y coordinados que promuevan la salud. Los padres, las escuelas, la comunidad y la sociedad en general coinciden en que la construcción de las habilidades socio-emocionales de los niños es una preocupación común. En la sección “Referencias” de este documento, se cita un libro que ayuda a los padres a crear un clima positivo en el hogar, construir las habilidades socio-emocionales de los niños y organizarse para que las responsabilidades familiares y las tareas escolares se cumplan. El folleto se titula Emotionally intelligent parenting,[1] el cual está disponible en por lo menos 10 diferentes idiomas al momento de elaborar este documento (noviembre 2002).

Aplicaciones prácticas[editar | editar código]

  • Proporcione a los padres repasos generales de las habilidades académicas y socio-emocionales que reciben los estudiantes.
  • Dé oportunidad a los padres para reunirse e intercambiar ideas de cómo apoyar la enseñanza escolar y cómo educar a sus hijos.
  • Ayude a los padres a aprender a organizar la rutina matutina y la rutina de las tareas para reducir conflictos.
  • Comunique a los padres la importancia de pasar ratos positivos con sus hijos, a pesar de cualquier dificultad, con el fin de crear en los niños un sentido de esperanza.
  • Proporcione regularmente a los padres oportunidades para contribuir con el salón de clase y la escuela.
  • Cree en la escuela un clima de bienvenida para los padres cerca de la entrada al plantel escolar cuando se exhiban trabajos artísticos de los alumnos.
  • Fije tiempo para la enseñanza y los proyectos familiares, si es que los padres y los estudiantes pueden trabajar juntos de manera apropiada.

Referencias[editar | editar código]

  1. Christenson, C.L.; Havsy, L.H. (2003). "Family-school-peer relationships: significance for social, emotional, and academic learning". En: Zins, J.E, et al., eds. Building school success on social and emotional learning. New York, NY, Teachers College Press.
  2. Elias, M.J.; Tobias, S.E.; Friedlander, B.S. (2000). Emotionally intelligent parenting: how to raise a self-disciplined, responsible, socially skilled child. New York, NY, Random House/Three Rivers Press.
  3. Epstein, J.L. (2001). School, family, and community partnerships: preparing educators and improving schools. Boulder, CO, Westview Press.
  4. Huang, L.; Gibbs, J. 1992. "Partners or adversaries? Home-school collaboration across culture, race, and ethnicity". En: Christenson, S; Close Conoley, J., eds. Home-school collaboration: enhancing children’s academic and social competence, p. 81–110. Silver Spring, MD, National Association of School Psychologists.
  1. N. del E. Traducción al español: Elias, M., S. Tobías y B. Friedlander (1999). Educar con inteligencia emocional: cómo conseguir que nuestros hijos sean responsables y adquieran un grado óptimo de sociabilidad. Plaza y Janes. Hay versión digital.