Cambios

Busca en cnbGuatemala con Google

m
Línea 15: Línea 15:  
La evaluación de competencias es un proceso de recopilación de ''datos significativos'', a partir de fuentes múltiples y variadas, que permiten dar cuenta del nivel de desarrollo de las competencias en los estudiantes. La evaluación de competencias se inscribe mejor en un enfoque que se ha dado en llamar ''“evaluación auténtica”'', entendida como una evaluación que plantea tareas que simulan cambios y situaciones complejas que ocurren en la vida cotidiana o en el mundo real. Este tipo de evaluación, opuesta a otras formas tradicionales de evaluación, quiere incidir en la transferencia de destrezas o competencias a situaciones de la vida, más allá de los ejercicios académicos del aula. Las condiciones de la evaluación guardan un grado de similitud con las que se aplicarán en la vida. De acuerdo con el enfoque de “aprendizaje situado”, quiere dar a los estudiantes la oportunidad de conectar sus aprendizajes y aplicar sus conocimientos a tareas y problemas del mundo real. La evaluación se plantea, entonces, en conexión con situaciones habituales que una persona suele afrontar en la vida diaria.
 
La evaluación de competencias es un proceso de recopilación de ''datos significativos'', a partir de fuentes múltiples y variadas, que permiten dar cuenta del nivel de desarrollo de las competencias en los estudiantes. La evaluación de competencias se inscribe mejor en un enfoque que se ha dado en llamar ''“evaluación auténtica”'', entendida como una evaluación que plantea tareas que simulan cambios y situaciones complejas que ocurren en la vida cotidiana o en el mundo real. Este tipo de evaluación, opuesta a otras formas tradicionales de evaluación, quiere incidir en la transferencia de destrezas o competencias a situaciones de la vida, más allá de los ejercicios académicos del aula. Las condiciones de la evaluación guardan un grado de similitud con las que se aplicarán en la vida. De acuerdo con el enfoque de “aprendizaje situado”, quiere dar a los estudiantes la oportunidad de conectar sus aprendizajes y aplicar sus conocimientos a tareas y problemas del mundo real. La evaluación se plantea, entonces, en conexión con situaciones habituales que una persona suele afrontar en la vida diaria.
   −
Su objetivo es proveer informaciones válidas y confiables sobre lo que el estudiante realmente conoce y es capaz de hacer en contextos reales, bajo condiciones naturales. Importa, por ello, que los estudiantes construyan las respuestas, encajando distintas piezas, en lugar de seleccionar respuestas de opciones preexistentes. Por otra parte, suelen requerir actividades de orden superior, como destrezas mentales o cognitivas. Además de los problemas de situaciones reales que se planteen para su resolución, algunos instrumentos incluyen el aprendizaje basado en problemas, portafolios, uso de rúbricas, elaboración de informes, entre otros. Diseñar una evaluación auténtica, en este sentido requiere preparación, lo que supone articular claramente los aprendizajes esperados. Una evaluación, básicamente, sólo puede ser auténtica si están bien articulados los resultados del aprendizaje con contextos que reflejan el mundo real.
+
Su objetivo es proveer informaciones válidas y confiables sobre lo que el estudiante realmente conoce y es capaz de hacer en contextos reales, bajo condiciones naturales. Importa, por ello, que los estudiantes construyan las respuestas, encajando distintas piezas, en lugar de seleccionar respuestas de opciones preexistentes. Por otra parte, suelen requerir actividades de orden superior, como destrezas mentales o cognitivas. Además de los problemas de situaciones reales que se planteen para su resolución, algunos instrumentos incluyen el [[Situaciones problema o familia de situaciones problema (Herramienta pedagógica)|aprendizaje basado en problemas]], [[Portafolio (Herramienta pedagógica)|portafolios]], uso de [[Rúbrica (Herramienta pedagógica)|rúbricas]], elaboración de informes, entre otros. Diseñar una evaluación auténtica, en este sentido requiere preparación, lo que supone articular claramente los aprendizajes esperados. Una evaluación, básicamente, sólo puede ser auténtica si están bien articulados los resultados del aprendizaje con contextos que reflejan el mundo real.
    
La evaluación de competencias, en lugar de un control que se limita a verificar la conformidad en relación con la norma establecida, es procesal y evolutiva, compara los logros sucesivos conseguidos por el estudiante con relación a un referente o nivel de desempeño. Esto supone cambios sustantivos en los modos de conducir la enseñanza y la evaluación. No basta con emplear únicamente los niveles o indicadores de logro determinados en las competencias de cada área curricular, etapa o grado. Precisamente por ser “competencias básicas” deben determinarse mecanismos de evaluación y el compromiso comunitario (docentes, escuela, familia y comunidad local, administración educativa) porque toda la población escolar consiga su adquisición o dominio.
 
La evaluación de competencias, en lugar de un control que se limita a verificar la conformidad en relación con la norma establecida, es procesal y evolutiva, compara los logros sucesivos conseguidos por el estudiante con relación a un referente o nivel de desempeño. Esto supone cambios sustantivos en los modos de conducir la enseñanza y la evaluación. No basta con emplear únicamente los niveles o indicadores de logro determinados en las competencias de cada área curricular, etapa o grado. Precisamente por ser “competencias básicas” deben determinarse mecanismos de evaluación y el compromiso comunitario (docentes, escuela, familia y comunidad local, administración educativa) porque toda la población escolar consiga su adquisición o dominio.