Orientaciones para la integración del enfoque de género en textos y materiales educativos

Para integrar el enfoque de género en los materiales educativos es importante considerar tres aspectos: ilustraciones, contenido y lenguaje. A continuación, se exponen algunas ideas al respecto.

Ilustraciones

Las ilustraciones en un texto ayudan a la comprensión del material porque explican visualmente el mismo mensaje transmitido con palabras; otras veces aportan información extra que puede ayudar a comprender mejor el texto. Además, tienen su propio lenguaje y deben ser portadoras de la integración de género.

Para el efecto se pueden tomar en cuenta las siguientes consideraciones:

a. Incluir una cantidad equilibrada de ilustraciones de hombres y mujeres. Las ilustraciones deben combinar la representación de hombres y mujeres de las diversas culturas del país y de distintos grupos etarios (niños, adultos, ancianos, jóvenes, etc.). De esta manera, unos y otros se sentirán identificados en el material.

b. Cuando en el texto no se identifica el sexo de los personajes, se deben alternar las ilustraciones de hombres y mujeres. Por ejemplo, si se dice que una persona venía caminando puede dibujarse una persona de género femenino o masculino.

c. Ilustrar hombres y mujeres en ámbitos públicos. En el contenido e ilustraciones, muchas veces se presenta solo a hombres como presidentes, alcaldes, concejales, dirigentes de los Consejos Comunitarios de Desarrollo -Cocodes-, directores de centros educativos, militares, deportistas y otros semejantes.

Es necesario que los materiales incluyan ilustraciones de mujeres y hombres realizando tareas del ámbito público para expresar que ellas también pueden aspirar a desempeñarlos.

d. Ilustrar hombres y mujeres en ámbitos laborales y ejerciendo diversas profesiones y funciones. Muchas veces se representa gráficamente a hombres como ingenieros, mecánicos, empresarios, ejecutivos, electricistas mientras que a las mujeres se les presenta como secretarias, enfermeras, maestras, asistentes sociales. Sin embargo, debe presentarse a hombres y mujeres en diversas profesiones; por ejemplo, una mujer ingeniera y un hombre, enfermero. Además, debe mostrarse a hombres y mujeres como jefes.

e. Ilustrar a hombres y mujeres en labores del ámbito doméstico, incluyendo el cuidado de los niños. En los materiales deben mostrarse a hombres y mujeres desempeñando todas las tareas domésticas para hacer notar que todos pueden participar en ellas con responsabilidades semejantes; es decir, muestran la corresponsabilidad en estas labores. En el caso de los hombres, es importante evitar un tratamiento superficial, por ejemplo, sacando la basura, cocinando el domingo, etc.

Contenido

El contenido de los materiales educativos incluye el desarrollo temático, las actividades, las evaluaciones, las lecturas y otros. El desarrollo temático consiste en la explicación de los temas de cada material; por ejemplo, la explicación de qué es el Sistema Solar. Las actividades de aprendizaje son todas indicaciones para aquello que deben hacer los estudiantes para alcanzar los propósitos de aprendizaje o alcanzar las competencias propuestas; por ejemplo: explique las funciones de una mujer ingeniera cuando instala una máquina. Las actividades de evaluación son las que permiten identificar si se cumplieron los propósitos de aprendizaje o competencia propuesta. Además, por su naturaleza, algunos materiales incluyen lecturas de diversos tipos. Para asegurar la integración del enfoque de género en el contenido pueden tomarse en cuenta los siguientes aspectos:

a. Incluir una cantidad equilibrada de personajes femeninos y masculinos. Esto puede darse cuando en Matemática se plantean los problemas para estudio de los temas; allí pueden alternarse entre hombres y mujeres cuando se presentan los casos, por ejemplo: si una abogada cobra...

b. Incluir hombres y mujeres en ámbitos públicos. Esto se logra cuando se presenta a hombres y mujeres como presidentes, alcaldes, concejales, directores de centros educativos, militares, deportistas y otros semejantes. Por ejemplo: en Medio Social y Natural se hace notar que el cuidado del Medio Ambiente es tarea de todos; hombres y mujeres.

c. Incorporar una cantidad equilibrada de hombres y mujeres en ámbitos laborales, ejerciendo diversas profesiones y funciones. Por ejemplo, cuando se enseñan las profesiones señalar que hombres y mujeres pueden ser ingenieros/ingenieras, mecánicos/mecánicas, empresarios/empresarias, ejecutivos/ejecutivas, electricistas, comerciantes, tejedores/tejedoras, agricultores/agricultoras, secretarios/secretarias, enfermeros/enfermeras, maestros/maestras, asistentes sociales.

d. Incluir hombres y mujeres en labores del ámbito doméstico. En los materiales debe mostrarse que todos pueden participar en las tareas de casa con responsabilidades semejantes.

e. Evitar el uso de estereotipos en la descripción de los personajes. Se transmiten estereotipos de género cuando siempre se muestra a las mujeres con características como las siguientes: ternura, sumisión, debilidad física, superficialidad, pasividad, abnegación, modestia, comprensión, comprometida y otras. Además, cuando se describe a los hombres solo con características como las enumeradas a continuación: autoritarios, atrevidos, agresivos, emprendedores, valientes.

f. Incluir personajes principales femeninos y masculinos en los textos literarios. Se puede mostrar a personajes, tanto hombres como mujeres, participando en juegos como cincos, ruedina, manejando bicicleta, muñecas, etc.

g. Explicar el papel de hombres y mujeres en la historia, los saberes culturales y la ciencia. Generalmente, los contenidos de Ciencias Sociales, Geografía e Historia se expresan desde el punto de vista masculino y el protagonismo de los hombres es absoluto; pues, se presentan grandes escritores, descubridores, conquistadores, etc. Por ejemplo, se resalta el aporte de Miguel Ángel Asturias, Mario Monteforte Toledo, Daniel Armas, Humberto Ak’abal, José Cecilio del Valle, Sam Colop; este reconocimiento es merecido, sin embargo, se omite a las mujeres que han sido protagonistas de la historia, artistas talentosas o mujeres exitosas; tal es el caso de Rosalina Menchú, Marielena López, Yahayda Tubac, Juana de Arco, Ana Bolena, Miriam López Hernández, Virginia Tacam, Leticia Teleguario, Mirciny Moliviatis, Juliana Sis, Rigoberta Menchú, Emilia Pardo Bazán, María Chinchilla, María Curie, Indira Gandhi, Benazir Bhutto. La ciencia y la técnica también aparecen como masculinos, pero es importante hacer notar el aporte de las mujeres en estos campos; algunas científicas sobresalientes son: Patricia Castellanos, Marion Popenoe, Ana Leticia Cáceres, Aída Cifuentes.

Lenguaje

El uso del lenguaje es fundamental para integrar el enfoque de género en los materiales; el lenguaje es sexista cuando contribuye a transmitir prejuicios culturales relacionados con la identidad sexual o con la minusvaloración de hombres o mujeres. Para integrar el enfoque de género en el uso del lenguaje se debe:

a. Prescindir de palabras ofensivas cuando se habla o se refiere a una mujer; por ejemplo, se deben evitar palabras como mujer “pública”, golfa, entre otras.

b. Excluir el uso de palabras con connotaciones despectivas para referirse a las mujeres; por ejemplo: zorra y perra.

c. Evitar el uso de frases despectivas para referirse a hombres y mujeres; es decir, frases sexistas, por ejemplo: “juega como niña”, “los hombres no lloran”, “debe estar en sus días”.

d. Usar la forma en femenino para referirse a las mujeres que se desempeñan en diversas profesiones, cargos y puestos; por ejemplo, Marta es ingeniera.

e. Emplear formas neutras de títulos y funciones; por ejemplo, “alumnado” en lugar de “alumno”; personas, para incluir a hombres y mujeres; infancia, para referirse a niños y niñas; alguien o cualquiera, en lugar de uno (alguien de la clase).

f. Usar dobles formas para indicar género, cuando corresponda, por ejemplo: los y las alumnos, los niños y las niñas. A veces, esta forma puede ampliar la extensión del texto, por lo cual, se prefiere incluir una nota aclaratoria donde se explique que en el texto se usa el masculino genérico y que este incluye siempre a hombres y mujeres.

En el siguiente apartado se incluyen dos instrumentos que pueden utilizarse para revisar la integración del enfoque de género; uno para textos y otro, para libros de lectura.

Consiste en identificar, cuestionar, reflexionar, analizar y tener en cuenta las diferencias y desigualdades entre mujeres y hombres, así como sus diferentes situaciones de partida, necesidades básicas e intereses estratégicos a la hora de diseñar y planificar cualquier actividad, proyecto, programa o política.

Conjunto de sonidos articulados con que el hombre manifiesta lo que piensa o siente (DRAE). Facultad que sirve para establecer comunicación en un entorno social, se le considera como un instrumento del pensamiento para representar, categorizar y comprender la realidad, regular la conducta propia y de alguna manera, influir en los demás.

El género es un conjunto de valores, creencias e ideas sobre los comportamientos y actividades que en una determinada cultura son adecuados para las mujeres y los que son adecuados para los hombres, es decir, su identificación con la femineidad y con la masculinidad.

Se refiere a las diferencias biológicas entre hombres y mujeres, las cuales vienen dadas por los cromosomas, las gónadas, las hormonas y los órganos sexuales. Es la corporalidad, el funcionamiento y forma del cuerpo. Es algo innato, biológico, que cambia de forma y funcionamiento de acuerdo a la edad.

Son las ideas compartidas, generalizadas y distorsionadas por un grupo social sobre cómo son, cuál es el papel o a qué se dedican los hombres y las mujeres.

Es un documento funcional, generalmente breve, que sirve para comunicarse por escrito en situaciones de la vida cotidiana.