Procesos de asesoría pedagógica
Como se indica en la introducción del modelo, la definición del trabajo del asesor pedagógico es “Llevar a una persona valiosa de donde él o ella está a donde él o ella puede llegar”. En términos prácticos, la tarea consiste, básicamente, en apoyar a cada docente a desarrollar su verdadero potencial. Este apoyo se centra en la aplicación de varios procesos y herramientas que le ayuden en su mejoramiento continuo. En esta sección usted encontrará el “ciclo de reflexión”, el cual es la base de los procesos de observación y colaboración con los docentes; la primera visita diagnóstica y de planeación en la escuela; el modelaje de técnicas de aprendizaje activo, y la orientación técnica pedagógica con los directores de las escuelas.
Proceso de mejoramiento continuo[editar | editar código]
El proceso de asesoría pedagógica inicia con tres fases importantes: la visita al centro educativo; observación de la aplicación de la metodología y técnicas utilizadas por el docente en el aula, y la orientación a los docentes para que fortalezcan o mejoren el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Es importante destacar que el rol más importante del asesor pedagógico es apoyar al docente a visibilizar sus debilidades y fortalezas dentro del aula, sensibilizarlo y comprometerlo al mejoramiento continuo. Esto implica que el asesor pedagógico pasará la mayor cantidad de tiempo posible acompañando al docente en el aula.
Hay un proceso que forma la base para todos los procesos de la asesoría pedagógica y es el ciclo de reflexión. Además, hay varios procesos prácticos que complementan y fortalecen los procesos de observación y colaboración, entre ellos:
- La primera visita diagnóstica y de planeación en la escuela (una vez al año).
- El modelaje de técnicas de aprendizaje activo a los docentes (cuando es posible y/o necesario).
- Orientación sobre asesoría pedagógica a la directora (durante cada visita).
- Orientación y seguimiento a la implementación de las estrategias y programas del Mineduc (durante cada visita) y en talleres cuando trabaje con grupos de docentes.
- Orientación para la autorreflexión de la práctica docente y para el establecimiento de metas de mejora, enfocadas en el aprendizaje de los estudiantes (durante cada visita).
A continuación, se desarrollan cada uno de los procesos indicados detallando su aplicación práctica para lograr un acompañamiento pedagógico eficiente en la escuela.
Proceso de observación y colaboración con los docentes[editar | editar código]
El proceso de observación y colaboración con los docentes se basa en el modelo de mejoramiento continuo, conocido como ciclo de reflexión. El trabajo del asesor pedagógico se enfoca dentro del aula porque es allí donde se puede apoyar efectivamente a cada docente en su formación continua. Las investigaciones pedagógicas indican que el proceso de mejoramiento continuo es implementado óptimamente en el mismo lugar de trabajo, es decir, en el aula del docente [1]. Primero, vemos el ciclo de reflexión como base del acompañamiento en el aula y luego su aplicación práctica.
Ciclo de reflexión Es un proceso que se utiliza individualmente con docentes, directores y/o de manera grupal con los actores que intervienen en el proceso educativo, el cual tiene como propósito concientizar y comprometer al docente con la mejora continua en las prácticas docentes que se desarrollan en la escuela. Tal como lo indica el esquema siguiente, el ciclo de reflexión se enfoca en tres etapas que debe abordar el asesor pedagógico: 1. Enseñar y evaluar; 2. Analizar y evidenciar, y 3. Reflexionar y planear.
- Enseñar y evaluar (Hacer). El docente planifica las lecciones del día y luego las desarrolla en el aula. Dicha acción provee evidencias sobre los logros alcanzados. El asesor pedagógico observa esta actuación y recopila las evidencias.
- Analizar y evidenciar (Analizar). Lo observado en el aula y la evidencia de los logros alcanzados y analizados son revisados por el asesor pedagógico juntamente con el docente, quienes comparan lo desarrollado dentro del aula con lo planificado.
- Reflexionar y planear (Ajustar). El asesor pedagógico y el docente reflexionan sobre el proceso, proponen nuevas metas y estrategias para afinar y mejorar la práctica docente. Esto conduce a nuevas acciones que deberán planificar, lo que lleva a la repetición del ciclo.
El ciclo de reflexión forma la base del proceso de observación y colaboración que el asesor pedagógico utiliza en su trabajo de acompañamiento. A continuación, se presentan dos procesos de observación y colaboración prácticos y efectivos para aplicar con los docentes: el proceso COC y el proceso de miniobservaciones.
Proceso COC
Para obtener mejores resultados en el proceso de observación y colaboración, hemos integrado el proceso de mejoramiento continuo de “hacer, analizar y ajustar” dentro de nuestro proceso de observación denominándolo COC.
Este proceso de observación y colaboración está compuesto por tres fases, como lo indican sus siglas COC: 1. Conversación antes de la observación; 2. Observación de la actividad docente, y 3. Construcción conjunta después de la observación. Como se observa abajo, el COC es un proceso personalizado y lleva un tiempo aproximado de una hora con cada docente[2].
- 1. Conversación antes de la observación
- El asesor pedagógico se reúne con el docente por un espacio de 5 a 10 minutos para conversar e informar sobre lo que va a observar durante la lección en el aula. Esto ayuda al docente a aclarar lo que se va a observar en su clase, de acuerdo con lo que tiene planificado. Esta conversación presenta oportunidades para que el asesor pedagógico apoye al docente en su planificación, si se considera necesario. Para esta conversación se utiliza la Guía de conversación con el docente (Forma AP-2), tomada del Manual del Asesor Pedagógico Bilingüe Intercultural[3]. Se recomienda que el docente incluya una de las técnicas de aprendizaje activo durante la observación si ya ha sido previamente modelada por el asesor pedagógico.
- 2. Observación de la actividad docente
- El asesor pedagógico observa la lección desarrollada por el docente durante unos 15 a 25 minutos, especialmente la técnica de aprendizaje activo utilizada y otros puntos considerados en la planificación del docente. El propósito de la observación es tomar notas con datos objetivos del proceso de enseñanza-aprendizaje para posteriormente compartirlos en su conversación con el docente. El asesor pedagógico no escribe recomendaciones. Se utiliza la Guía de observación en el aula (Forma AP-3) del Manual del Asesor Pedagógico Bilingüe Intercultural[4].
- 3. Construcción conjunta después de la observación
- El asesor pedagógico se reúne con el docente después de terminar la observación, por un espacio de 15 a 25 minutos con el fin analizar conjuntamente el desarrollo de la lección en el aula de forma reflexiva y llegar a la construcción de un plan breve de mejoramiento continuo para el docente. En esta fase, se identifican las buenas prácticas de los aprendizajes y los aspectos que deben ser fortalecidos, además, se proponen las oportunidades de mejora y las estrategias para lograrlas. Se utiliza la Conversación con el docente después de la observación en el aula (Forma AP-4) del Manual del Asesor Pedagógico Bilingüe Intercultural[5].
Después del análisis y la reflexión, se espera que los docentes incluyan en su práctica diaria: a) las observaciones recibidas, y b) las propuestas de las estrategias de enseñanza, aprendizaje y evaluación, para lograr una educación de calidad.
Se sugiere que realicen la construcción conjunta el asesor pedagógico y el docente, mientras los estudiantes desarrollan una tarea que no requiera la intervención del docente, o al finalizar la jornada escolar. Además, se sugiere compartir las propuestas con la directora para que los guíe en su función tutorial.
El asesor pedagógico se reúne con el docente Felipe para platicar sobre la lección que va a observar. El asesor pedagógico trata al docente con mucho respeto, amabilidad, y le sonríe mucho durante la reunión. El asesor pedagógico utiliza la Guía de conversación con el docente antes de la observación (Forma AP-2), realiza las preguntas para aclarar lo que se va a observar y escribe notas breves. Felipe le cuenta sus dificultades para mantener la atención de sus estudiantes. Además,le comenta que no tiene mucho conocimiento del CNB. Mientras el asesor pedagógico conversa con Felipe, la docente María, de otra aula, colabora atendiendo en su aula a los estudiantes de Felipe durante 15 minutos.
Al terminar la reunión, los estudiantes vuelven al aula, Felipe les presenta brevemente al asesor pedagógico y les indica que estará observando la clase. Al momento de iniciar la lección, el asesor pedagógico se sienta atrás del salón, observa y toma notas utilizando la Guía de observación (Forma AP-3). Como la Forma AP-3 es muy extensa y detallada, el asesor solamente anota lo más relevante y se concentra en la Sección 8 de la Forma AP-3 donde se refiere al uso del tiempo de los estudiantes, porque se da cuenta de que Felipe no les da instrucciones claras y ellos a veces no entienden qué hacer.
Después de 30 minutos, terminan la lección. Felipe envía a sus estudiantes nuevamente a la docente María para poder reunirse otra vez con el asesor pedagógico. El asesor pedagógico le muestra sus notas realizadas en la Guía de observación (Forma AP-3). Asimismo, el asesor pedagógico utiliza la Guía de conversación (Forma AP-4), la cual dura unos 20 minutos, para guiar la conversación y hacerla efectiva. Felipe reconoce sus dificultades con la disciplina de los estudiantes y pide apoyo para mejorar esa situación. Juntos, el asesor pedagógico y Felipe elaboran un plan breve para fortalecer las destrezas de manejo de grupo.
Como Felipe es un docente novato, el asesor pedagógico decide no enfocarse, por el momento, en otros temas. Su interés primordial, su prioridad, está en ayudar a Felipe para que aprenda a manejar al grupo. Los dos, comprometidos, firman la Guía de conversación (Forma AP-4) y de inmediato Felipe pone en acción su plan de mejora, contento de haber recibido el apoyo del asesor pedagógico.
Proceso de miniobservaciones
El proceso de miniobservaciones es un proceso de observación más preciso y breve. En lugar de observar una lección completa, se hacen tres observaciones cortas de aproximadamente cinco minutos cada una, en una sola visita a la escuela.
Con base en las respuestas a las preguntas de la conversación inicial con el docente, el asesor pedagógico planifica los momentos en los que realizará las miniobservaciones. Se otorga la preferencia a los momentos en los cuales el docente indicó, de acuerdo con su planificación, que trabajaría aspectos clave en los que se requiere mayor atención u orientación.
El propósito es concentrar la observación en tres momentos de la lección, de acuerdo con los pasos del aprendizaje significativo.
Ejemplo A: 1. La activación de conocimientos previos; 2. La introducción a los nuevos conocimientos, y 3. La práctica independiente.
Ejemplo B: 1. La enseñanza de una estrategia de comprensión lectora; 2. La práctica guiada, y 3. La evaluación y realimentación.
La diferencia con el COC es que las observaciones son más cortas, pero igual utilizan las mismas Formas AP-2, AP-3 y AP-4[6]. Realizar miniobservaciones permite, además, que el asesor pedagógico pueda observar a varios docentes en una misma visita a la escuela.
Cuando el asesor pedagógico decide que es más conveniente utilizar el proceso miniobservaciones, debe cumplir con el siguiente protocolo:
- Se reúne con cada uno de los docentes elegidos, por un espacio de 10 a 15 minutos cada uno, antes de observar; les hace las preguntas indicadas en la Forma AP-2, e informa el tiempo que llevará la fase de la observación y de la conversación después de las observaciones.
- Observa tres veces durante 5 minutos a cada docente y va haciendo anotaciones utilizando la Forma AP-3. En esta fase, el asesor pedagógico solamente anota lo más importante de lo que observa; no debe completar todo el formulario.
- Se reúne de 15 a 20 minutos con cada docente para reflexionar, escuchar los comentarios del docente y apoyarlo en su autoanálisis, con base en lo que él observó.
- Finaliza la conversación con acuerdos y compromisos del docente utilizando la Forma AP-4, con lo cual se busca aprovechar sus fortalezas y afinar sus prácticas pedagógicas. Lo importante es ayudar al docente a que de él mismo surjan metas de mejora de su práctica docente, enfocada en el aprendizaje de los estudiantes.
El asesor pedagógico llega a la escuela y se presenta con la directora. Luego, se reúne con el docente Felipe por un espacio de 15 minutos, utilizando la Forma AP-2. Como el tiempo es corto, el asesor pedagógico pide a Felipe que se enfoque en una sola área donde desea recibir apoyo. Mientras Felipe se reúne con el asesor pedagógico, la compañera docente María colabora recibiendo en su aula a los estudiantes de Felipe Al terminar la reunión, el docente Felipe colabora recibiendo a los estudiantes de María, quien entra con el asesor pedagógico para su conversación antes de las observaciones. Al terminar la reunión con María, a ella le corresponde colaborar para recibir a los estudiantes de Juana, quien será la siguiente docente que tendrá la conversación antes de la observación con el asesor pedagógico. De esta manera, el asesor pedagógico logra reunirse con los 3 docentes en menos de una hora, asimismo, logra la colaboración de los docentes para atender a los estudiantes de uno y del otro docente por un tiempo muy corto.'Si es posible, se recomienda que esta reunión con los docentes se realice antes de iniciar la jornada escolar.
Entonces, el asesor pedagógico observa, primero, la clase de Felipe durante 5 minutos en tres momentos diferentes y utiliza la Forma AP-3. Apunta solamente lo más relevante tomando en cuenta la petición del docente en la conversación inicial. De la misma manera, el asesor pedagógico observa la clase de María y, finalmente, observa la clase de Juana.
Al terminar las observaciones, el asesor pedagógico se reúne, primero, con el docente Felipe por un espacio de 15 a 20 minutos utilizando la Forma AP-4, y llegan a un acuerdo para una oportunidad de mejora. Seguidamente, se reúne con María, de la misma manera, y finalmente se reúne con Juana.
Así como se hizo en la fase de la conversación, los tres docentes colaboran en recibir a los estudiantes de un docente y del otro durante el tiempo que dure la reunión con el asesor pedagógico, o bien, la conversación se hace al finalizar la jornada escolar.
De esta manera, el asesor pedagógico puede observar cómo trabajan los tres docentes con sus estudiantes, cómo desarrollan las lecciones y cómo es la dinámica de trabajo de la escuela, incluyendo la colaboración entre ellos.
Proceso de primera visita diagnóstica a una escuela[editar | editar código]
La primera visita del asesor pedagógico a la escuela es diferente a las posteriores. Los objetivos de la primera visita son: 1. Conocer; 2. Informar; 3. Diagnosticar, y 4. Planear. A continuación, se detalla cada uno.
- Conocer la escuela, a su directora, docentes y estudiantes. Es la oportunidad de obtener datos importantes tales como la organización de los docentes y distribución de grados, las tasas de deserción, abandono, fracaso, y el rendimiento académico, entre otros.
- Informar sobre la asesoría pedagógica para los docentes y para la directora.
- Hacer un diagnóstico preliminar con base en visitas de, al menos, tres aulas. En el caso de una escuela multigrado o unidocente, se hace con base en la observación del trabajo con, al menos, tres grupos de estudiantes de diferentes grados.
- Acordar con la directora un plan preliminar de visitas y objetivos para el próximo año, basado en el diagnóstico preliminar de visitas y de los datos obtenidos en el diagnóstico.
El diagnóstico se repite cada año para detectar el progreso de la asesoría pedagógica y las nuevas necesidades que puedan surgir. Para este proceso, el asesor pedagógico utiliza el Protocolo para visita inicial con la directora del centro educativo (Forma AP-1).
Antes de su primera visita a una escuela, el asesor pedagógico debe:
- Comunicarse con la directora para informarle sobre la visita a la escuela y sus objetivos (preferiblemente, dos semanas antes).
- Coordinar con el supervisor y/o CTA encargado de la escuela para informarle de la fecha de la visita.
Al llegar a la escuela por primera vez, el asesor pedagógico debe tomar en cuenta lo siguiente:
- Presentarse ante la directora y recordarle los objetivos de la visita.
- Coordinar y visitar, acompañado de la directora, las aulas seleccionadas, por un espacio de 5 minutos cada una y observar los siguientes elementos para realizar el diagnóstico preliminar:
- Cómo, cuándo y cuánto utilizan la lengua materna de la comunidad y/o el español.
- Uso de técnicas de aprendizaje activo acordes con el CNB.
- Qué recursos utiliza para la enseñanza y aprendizaje (libros, murales informativos, rincones de lectura, ambientes letrados, entre otros).
- Cualquier otro elemento que pueda influir el ambiente de aprendizaje (ejemplos: organización, modo de enseñanza, modo de aprendizaje, comportamiento de los estudiantes, aspecto físico de las aulas).
- Presentarse personalmente a los docentes de la escuela como el asesor pedagógico de la región; informarles sobre sus funciones y el propósito de la visita, e indicarles que su propósito es brindar apoyo a la directora y a todos los docentes de la escuela durante el año escolar.
- Recopilar los datos correspondientes al diagnóstico de la escuela.
Después de las visitas a las aulas, el asesor pedagógico y la directora se reúnen para hacer un plan preliminar que incluye:
- Fechas tentativas de futuras visitas.
- Las estrategias y herramientas que serán utilizadas por el asesor pedagógico en sus próximas visitas (COC, miniobservaciones y el modelaje, nuevas técnicas de aprendizaje activo).
- El apoyo específico, enfocado en el aprendizaje de los alumnos, que puede brindar el asesor pedagógico a la directora.
- Metas específicas para medir el progreso[7]
La primera visita no debe durar más de 2 a 3 horas en total, y el plan preliminar sería, como máximo, de una hoja escrita. Es importante que el plan se enfoque en las necesidades de la enseñanza y el aprendizaje de los estudiantes del centro educativo.
Proceso de modelar una técnica de aprendizaje activo[editar | editar código]
El aprendizaje activo es simplemente “aprender haciendo”; logra que el estudiante participe en su propio aprendizaje haciendo algo. La enseñanza activa del docente requiere de técnicas de aprendizaje activo. Por ejemplo, un piloto aprende a volar no solamente leyendo libros (aprendizaje pasivo), sino maniobrando el avión (aprendizaje activo). Un estudiante aprende a escribir un poema no solo leyendo poemas y estudiando su estructura (aprendizaje pasivo). Es necesario desarrollar su propia poesía (aprendizaje activo). Utilizar el dictado y copiar palabras o frases de un libro o el tablero son ejemplos de aprendizaje pasivo porque el estudiante no construye su propio conocimiento. Se convierte en aprendizaje activo cuando el docente le pide que escriba sus propias ideas.
El CNB está enfocado en cambiar los papeles del docente y estudiante para poder enfrentar los retos de la sociedad moderna. El papel del docente cambia de ser un proveedor de información a un facilitador de aprendizaje. De la misma manera que el papel del estudiante cambia de ser un simple receptor de información a uno que aprende a analizar y utilizar información.
El proceso de modelar (mostrar) una técnica de aprendizaje activo es el siguiente:
- Informar a la directora del propósito de la visita Antes de llegar a una escuela, el asesor pedagógico le informa a la directora que necesita un tiempo de aproximadamente 30 minutos y el uso de un aula donde pueda modelar una técnica de aprendizaje activo a, por ejemplo, todos los docentes de primero a tercer grado.
- Modelaje de una técnica de enseñanza Al llegar el asesor pedagógico a la escuela, habiendo ya coordinado con la directora la reunión de los docentes de primero a tercer grado en un aula, procede a:
- Presentarse ante los docentes.
- Exponer brevemente una técnica de aprendizaje activo para la lectoescritura, de manera sencilla y de alto impacto para el aprendizaje.
- Modelar frente al grupo la aplicación de la técnica de aprendizaje activo, una o dos veces.
- Pedir a los docentes que practiquen la técnica con un compañero del grupo durante unos 5 a 10 minutos. Mientras el grupo practica, el asesor pedagógico observa el aprendizaje.
- Realimentar al grupo de su progreso.
- Y comprometer a los docentes a que practiquen en sus aulas la técnica, utilizándola, como mínimo, 3 veces por semana durante 3 semanas consecutivas.
- Si es imposible realizar una sesión con todos los docentes, hay dos variaciones:
- Puede realizarse dos sesiones para que algunos docentes colaboren atendiendo a los estudiantes de los docentes que participaron en la sesión de modelaje, de modo que en la siguiente sesión les corresponderá a ellos participar en la sesión realizando la misma actividad. De esta manera se realizarían dos sesiones de 30 minutos cada una donde un 50% de los docentes asista a la primera sesión y la otra mitad a la segunda sesión.
- Si existiera el tiempo y la disponibilidad del docente, se puede realizar el modelaje de la técnica en la misma aula del docente frente a los estudiantes, para que el docente en seguida ponga en práctica lo aprendido. Esta variación es muy factible y efectiva, especialmente en las escuelas multigrado.
- Visita para observar la aplicación en el aula Después del modelaje, el asesor pedagógico visita varias aulas para observar al docente utilizando la nueva técnica, dándole realimentación inmediata. Si no hay tiempo durante esta visita, el asesor pedagógico realiza estas observaciones en su próxima visita.
Las investigaciones muestran claramente que el uso efectivo de pocas técnicas de aprendizaje activo en un aula puede cambiar significativamente el aprendizaje de los estudiantes. Por eso, el asesor pedagógico se enfoca en apoyar a los docentes enseñándoles únicamente de 2 a 3 nuevas técnicas, y debe velar porque las utilicen de manera correcta y las integren a su enseñanza diaria. Las técnicas deben estar en función de las competencias establecidas en cada área del CNB.
Hay muchas técnicas de aprendizaje activo que hacen que los estudiantes participen activamente en su propio aprendizaje. El asesor pedagógico debe tener en su posesión y hacer uso diario de libros y guías tales como Aprendizaje de la Lectoescritura, Enseñanza de la Comprensión Lectora, Herramientas de evaluación en el aula, entre otros.
El asesor pedagógico se comunica y coordina la visita con la directora de la escuela. Reunidos en el aula, el asesor saluda a los docentes. Dado el caso que el número de docentes sea grande y las clases ya hayan empezado, el asesor pedagógico decide trabajar con los docentes en dos grupos. El 50% de los docentes colabora recibiendo en sus aulas a los estudiantes de los docentes que participarán en la reunión de modelaje durante 30 minutos.
El asesor pedagógico procede a explicar una técnica sencilla de comprensión lectora, luego, modela la técnica de aprendizaje activo de hacer y responder preguntas sobre el texto. El asesor modela la técnica de lectura de hacer y responder preguntas en un texto, lo hace leyendo junto con los docentes un pequeño texto. Luego, el asesor pedagógico modela sobre cómo utilizar los tres tipos de preguntas para un aprendizaje activo (Justo ahí, Piensa y busca, y El autor y yo).
Al finalizar, el asesor pedagógico pregunta si todos entendieron la técnica. Luego, modela la técnica nueva mente y hace que cada uno de los participantes practiquen con los tres tipos de preguntas, durante tres minutos, con su compañero de al lado. Al terminar los tres minutos, les pide que cambien de rol para que ambos tengan la oportunidad de practicar la técnica. Mientras practican, el asesor pedagógico observa la aplicación de la técnica y realiza las observaciones y/o sugerencias necesarias a cada docente[8].
Al terminar el modelaje y la práctica, el asesor pregunta a los docentes si tienen algún comentario o duda al respecto. Todo este proceso de modelaje dura de 20 a 25 minutos
Proceso de orientar a la directora en asesoría pedagógica[editar | editar código]
Uno de los objetivos de la asesoría pedagógica es orientar a la directora de cada escuela sobre la importancia de apoyar a los docentes en su mejoramiento continuo, y brindarle conocimientos y herramientas para que la misma directora empiece a hacer asesoría. Se entiende que esta orientación es más fácil para las directoras que son liberadas o sin grado. Sin embargo, es importante que todas las directoras lleguen a conocer los procesos de acompañamiento pedagógico.
Hay cuatro procesos importantes en la asesoría a la directora:
- Visitar las aulas para detectar necesidades de técnicas de aprendizaje activo que utiliza cada docente y/u otras necesidades en la enseñanza.
- Hacer un plan breve junto con la directora para que forme parte del proceso de asesoría pedagógica.
- Pedir que la directora participe en las sesiones donde se modela una técnica de aprendizaje activo. Luego, la directora debe motivar y apoyar a los docentes para que utilicen dichas técnicas.
- Motivar y orientar a la directora para que utilice las técnicas del asesor pedagógico en sus propias observaciones y conversaciones con los docentes. Para desarrollar los conocimientos y destrezas de asesoría de la directora, el asesor pedagógico la invita a participar en los procesos COC y/o miniobservaciones con algún docente. A la vez, es de suma importancia que la directora del centro educativo dé seguimiento a los compromisos adquiridos entre el asesor pedagógico y cada docente.
La finalidad de proporcionar orientación a la directora de cada escuela es que haya un seguimiento de la asesoría pedagógica por parte de la misma directora con los objetivos; que exista un proceso de mejora continua en el centro educativo, y que la directora poco a poco vaya aprendiendo a ser una asesora pedagógica para apoyar a sus propios docentes.
Referencias[editar | editar código]
- ↑ Joyce y Showers, 1976, 1982
- ↑ Nota: Aunque el COC es un proceso efectivo y preferido de observación y colaboración, en algunas circunstancias es conveniente hacer miniobservaciones en lugar de una sola observación más larga.
- ↑ Incluida en el Anexo A.
- ↑ Incluida en el Anexo A.
- ↑ Incluida en el Anexo A.
- ↑ Incluidas en el Anexo A.
- ↑ Nota: deben enfocarse en metas medibles que pueden incluir el rendimiento académico de los alumnos, así como las tasas de deserción, abandono, fracaso escolar, asistencia, etc.
- ↑ tomado de las páginas 167 y 182 a 184 del texto Enseñanza de la Comprensión Lectora, USAID 2017.
Fase de desarrollo o puesta en práctica de un currículum o programa educativo. Comprende el conjunto de procesos encaminados a adaptar el plan innovador. Puede ser juzgada en función de su “fidelidad” al diseño oficial o, por el contrario, por la adaptación propia que se hace a los contextos específicos.
Indicadores de éxito de un plan escrito en forma específica.
Una persona que posee el uso y función dual o concurrente de dos idiomas.
Aplicar estrategias para entender y recordar. Implica estar en capacidad de comunicar lo que se ha leído y escuchado.
Identificación de una enfermedad a partir de sus síntomas. También: acción y efecto de recoger y analizar datos para evaluar problemas de diversa naturaleza.
Término introducido por Le Boterf, entendido como los conocimientos, procedimientos y actitudes que es preciso emplear para resolver una situación. Unos son recursos internos, que posee la persona, tales como conocimientos, procedimientos y actitudes
Espacio vital en el que se desarrolla el ser humano. Conjunto de estímulos que condicionan al ser humano desde el momento mismo de su concepción.
Proceso por el cual las personas adquieren cambios en su comportamiento, mejoran sus actuaciones, reorganizan su pensamiento o descubren nuevas maneras de comportamiento y nuevos conceptos e información.